La Barranca. Tuberías. Collado Emburriadero
- jubilatassenderistas
- 24 feb 2016
- 2 Min. de lectura

La decisión de hacer esta ruta por el Valle de la Barranca se tomó después de varios días de intercambio de opiniones en el foro con el que este grupo se relaciona en WhatsApp, y se debió a que Fernando Sotillo había estado el fin de semana anterior y comentó que había bastante nieve con lo cual el grupo de presión de los mas aguerridos ganó la partida para hacer la primera del invierno con nieve, aunque había una razón muy poderosa también para esta convocatoria y no era otra que la reserva que había hecho Antonio Lusquiños para comer un cocido en El Escorial una vez finalizada la marcha. Se echó de menos la presencia de algunos de los principales valedores de las marchas con menú, que faltaron como no puede se de otra manera por razones de importancia.
Quedamos a las 9 30h en un bar de la Plaza del Álamo de Navacerrada donde desayunamos y charlamos un rato como de costumbre. En esta ocasión los participantes fueron, David, Fernando Sotillo, Fernando Sicilia, Gabriel, Gerardo, J.L. Abarca, J.L. Llorente, Juan Antonio, Juanma, Juan Carlos, Luis Velasco, Paco Romero y Antonio Lusquiños que solo pudo ir a la comida.
La marcha queda descrita en la ficha técnica y la comenzamos en el aparcamiento del Valle de La Barranca con una mañana soleada, pero que en la parte final de la marcha cambió y terminó con una niebla cerrada. Recorrimos este Valle conocido y de buenos y variados paisajes, Guarramillas, Maliciosa y Garganta del Infierno hacia el norte y hacia el sur el pueblo y embalse de Navacerrada cerrando al final la vista de Madrid capital. Lugares como el Collado Emburriaderos, Senda Ortiz, Fuente de Mingo, Sendero de Las Tuberías, que debe su nombre a las tuberías de hierro que suministraban el agua que captaban en los manantiales de la ladera sur de las Guarramillas al Real Sanatorio de Navacerrada.
También encontramos miradores notables como el de Las Canchas, y el que toma el nombre del Real Sanatorio de Navacerrada, que ocupa la explanada donde en su día se encontraba el citado Sanatorio. Este se construyó en 1918 para curar a los enfermos de tuberculosis cuando los únicos remedios que había para esta enfermedad eran el aire puro, el reposo y las alturas superiores a las de la meseta. La evolución de los antibióticos hizo innecesarias estas instalaciones, y después de años de abandono, fue demolido en 1994.
A las 14 30h terminamos el recorrido que nos permitió disfrutar de la nieve en los tramos de mayor altura y de aquí nos desplazamos a El Escorial, donde nos esperaba Antonio Lusquiños que ejerció de anfitrión y reservó el cocido en el Restaurante Las Viandas. Poco después de las 15h nos pusimos manos a la obra para dar cuenta del citado cocido que nos merecíamos después de una marcha de 12 Km. de desnivel mediano y que Fernándo Sotillo se encargó de que la cumpliéramos en tiempo para llegar en hora al cocido.
Terminada la comida nos desplazamos a los soportales, donde tomamos las última, acompañados de la lluvia que había comenzado antes de llegar a El Escorial, y aquí despedida y regreso a Madrid.
Comentários